*El Gobernador Murat a un paso de la cárcel por alterar una determinación Judicial del Consejo de la Judicatura.*
En una temeraria estrategia planeada mucho antes de emitir la convocatoria para Magistrados, Tinajero y Avilés, ponen en riesgo la libertad de Alejandro Murat.
En su afán de imponer a Moises Molina y Abraham Soriano, forzaron y manipularon todo el procedimiento para la designación de magistrados:
*La convocatoria que solo dio dos para la presentación de documentos, con el propósito de imposibilitar la participación de más interesados.
*Un examen fast track de los aspirantes para no evidenciar la poca experiencia y falta de conocimiento de sus incondicionales.
*El enviar dos ternas evidentemente ilegales, para poder incluir a Moises y Abraham. Y aquí es donde cometen varios delitos según se explicará más adelante.
*El entorpecer con ayuda de varios diputados de Morena el procedimiento legislativo, una vez que la Comisión de Justicia dictaminara a favor de distintos aspirantes, Alejandro Magno y Ericka Rodriguez.
* Lograr que la Comisión Permanente del Congreso citará a sesión extraordinaria hasta el cinco de mayo, después de vencido el plazo de 20 días que el mismo Congreso tenía para elegir dentro de las ternas propuestas por el Gobernador
*Finalmente al haber pasado esos 20 días, todo indica que impondrá a Moises Molina y Abraham Soriano.
De hacerlo así, Murat no solo perderá la poca credibilidad que le queda como gobernante, sino que se coloca en la antesala de ser juzgado por diversos delitos.
Así es, el Consejo de la Judicatura en cumplimiento a la Constitución de Estado y en los que se podría suponer en un acto iluso de una supuesta paridad de género, mando una lista de ocho aspirantes, una de mujeres y otra de varones por cada vacante de magistrado, a las que Murat se tenía que sujetar y estaba obligado a respetar porque así lo ordena expresamente la citada constitución.
En su artículo 102 se lee sin mayor dificultad que el Consejo de la Judicatura remitirá al Gobernador del Estado una lista que contenga ocho candidatos, de los cuales el Gobernador enviará una terna al Congreso del Estado para que elija a quien debe ser Magistrado. Artículo qué paradójicamente el propio Murat incluye en la convocatoria y donde expresamente dice que por cada vacante se mandará una lista de ocho.
Es decir de cada lista el gobernador está obligado, por la propia constitución, de manera forzosa a elegir a tres. No obstante y a pesar que en los documentos que están en el propio Congreso se encuentra la resolución del Consejo en la que determina por ser su facultad exclusiva, las dos listas, una para cada terna, y remata que es para respetar la paridad de género. De donde según el documento del Consejo, remite una lista de ocho mujeres, para que Murat elija una terna de tres mujeres. De igual forma envía una lista de ocho varones para que elija una terna de tres varones. Más claro ni el agua.
Sin embargo, valiéndole a sus flamantes asesores y se entiende que al mismo Murat, lo que ordena la Constitución, y en su afán de imponer a un delincuente y a un corrupto, incondicionales de él, agarraron las dos listas e hicieron de ellas lo que ahora sabemos, un verdadero chilaquil.
La falta de respeto a la Constitución del Estado y la alteración de las listas para hacer sus ternas a modo pone al Gobernador en la picota.
!!El final estará de película!!
Murat se arriesgará en estos momentos inciertos, para cualquier gobernador, a cometer varios delitos en los que su propia firma va de por medio y en consecuencia su libertad o recapacitará y nombrará solamente a uno de sus incondicionales y a una mujer para respetar lo enviado por el Consejo?
Seguramente varios de sus queridos “amigos” preferirán respete los designios de su Padre, cuéstele lo que le cueste.
Y para que no digan que es chisme acá están las fotos de los documentos que corrobora lo aquí comentado.